PIDO LA PALABRA

HASTA SIEMPRE FIDEL,

NO TE OLVIDAREMOS

Francisco Javier Sáinz "El Secre"

Me siento obligado, por mil razones entre ellas la amistad, a homenajear desde esta publicación, al que considero gran aficionado a la pelota  y  persona de bien.

Fidel Maiso, nos ha dejado  inesperadamente y sin ningún indicio que nos hiciese sospechar que su final estaba cerca. Para muchos, y creo no les falta razón, la muerte repentina es la forma menos mala de acabar el inapelable final del camino. La sorpresa, el momento, la llamada de teléfono, la noticia en sí, te provoca una sensación de vacío brutal. Es aquello que irremisiblemente te van a comentar muchos de sus conocidos o amigos, “pero si estuve ayer con él, si estaba fenomenal, si me dijo que...”.

Podemos sacar a colación mil anécdotas, conversaciones, debates a cuenta de la afición que nos unió, la pelota, y siempre terminaremos sopesando  la fatalidad, el temor, la tragedia. Luego pasado un tiempo, concluiremos con frases lapidarias, que de alguna manera nos animan a seguir adelante. “La vida sigue, el espectáculo debe continuar, que nos espere mucho tiempo”, pero nada ni nadie podrá evitar la sensación de vacío que algunas personas dejan en el ánimo de los que tuvieron la suerte de conocerlo.

Fue Fidel Maiso, todo lo que se puede ser en el mundo de la pelota. Recuerdo cuando junto con uno de sus hermanos, que dejo de existir prematuramente, ocupaban la línea de contracancha del Adarraga en todos los partidos de la feria matea, ejerciendo de jueces, y que yo sepa, casi siempre, a gusto de todos o casi todos, porque las decisiones contrarias, no siempre se asimilan correctamente. Fidel sabía mucho, no sólo como juez, pelotari, historia de la pelota y miles de anécdotas, archivadas en su memoria,  que de vez en cuando publicaba, de viva voz, ante la curiosidad de otros contertulios menos avezados.

El frontón del Revellín, el antiguo sobre todo,  menos el actual,  porque de aquel disfrutó mucho tiempo y de este no tanto, precisamente porque la vida no da más de si, aunque es cierto que hasta el último día e ininterrumpidamente hizo acto de presencia en el recinto. Digo hasta el último día, no como una frase hecha, sino literalmente. Llegó hasta los 79 años, y recuerdo perfectamente, que a algunos de los que le felicitaron el día que los cumplió, agradecido, y en clave de humor, les advirtió que estaba a punto de entrar en la última década. No pudo llegar.

Fue un pelotari  habilidoso, de buenos y muchos reflejos, pillo aunque limpio, y gozador por antonomasia. Sólo unos pocos años hace que dejo la actividad, pero inmediatamente se recicló y dejó la cancha, para ocupar butaca, siempre cerca del pelotari, ejerciendo de botillero voluntario, por puro instinto perfeccionista.

Me caía bien y creo que la simpatía era recíproca. No dudaba en llamarme por teléfono o personalmente para solventar cualquier duda sobre la historia de la pelota  o de sus superhéroes a lo largo del tiempo.

Siempre trate de satisfacer su curiosidad, incluso le propuse varias veces venir a Televisión. No acepto mi invitación, y creo que no por falta de ganas, sino por respeto a los televidentes, quizás por sentirse mayor o por  pudor. Yo lo animaba porque su testimonio tenia categoría histórica para las nuevas generaciones, pero inútil fue insistir y bien que lo sentí.

Ahora, amigo Fidel, la historia eres tú y como tal vamos a echar mano de tus consejos, de tu ciencia, de tu amor por nuestro deporte, y del auténtico significado de la lealtad. Es tu legado y ojalá lo sepamos disfrutar.

Rioja Sport © 2017

Todos los derechos reservados | Política de Privacidad